Aguafuerte, agua tinta y punta seca (148x192 mm.)

Una hilera de hombres,  pertenecientes a todas las clases sociales: sadertotes con sombrero de tejas, nobles, frailes, personajes humildes, etc., con rotros apesadumbrados y con la mirada hacía el suelo, caminan de forma lenta y ondulante por un paisaje árido.  

No podemos ver hacía donde se dirigen, ni de donde vienen y parecen guiados por un personaje ciego. La escena nos transmite una sensación de estancamiento en la que no avanzan, con la que Goya nos expresa la situación en la que se encuentra el país tras la Guerra de la Independencia y la llegada al poder de Fernando VII.

 

Nos recuerda también a una parabola de la Biblia donde se expresa la idea que de un ciego que guía a ciegos, solo se puede esperar la desgracia.

Con este personaje que encabeza la fila de hombres sugiere que el país está dirigido por un monarca ciego a la luz de la razón.

Lafuente Ferrari duda que los personajes atados pudiesen ser españoles que regresan de estar cautivos en Francia y no saben qué partido tomar ante la nueva situación del país o bien que, han podido ser castigados por Fernando VII y van camino de los presidios de Africa.